En esta serie se presentan
retratos hechos a edificios que están en obra gris, eso quiere decir
en un nivel intermedio de su construcción, a los cuales por diversas
razones se les dejó en el rezago antes de su culminación. Estos
lugares por un lado reflejan estancamiento y deterioro de un proyecto
que quedó inconcluso, por otra parte son un manifiesto de aquello que
no llegó a ser, tanto en la construcción, como para quienes los
pensaron como un plan de una nueva vida.
Sus
muros anónimos tomaron forma según un sueño, la ilusión de alguna
familia o una promesa de una vida juntos de alguna pareja, todos ellos
destinos truncados, proyectos pausados indefinidamente, y olvidados. ¿A
dónde van los sueños, las promesas y los amores cuando se abandonan?
Quizá vivan en el lugar de lo obsoleto y lo olvidado, de las cosas
que se quedaron sin terminar, escenarios como estos, en la espera de
que algún día los rescaten, o los olviden por siempre.